miércoles, 13 de julio de 2016

Yo era de esas que hablaba sin saber, antes de ser mamá.




Una de mis amigas, excompañeras del cole tuvo a su bebita hace unos cuantos meses. Alláaa hace unos años, cuando teníamos los 20´s nos sentábamos a la mesa a conversar, ¡de todo! Y uno de los temas era "cuando seamos mamás". Y todas pensábamos estas mismas cosas. 

Hace unos días Marce posteó esto en su facebook y le pedí permiso para compartirlo con ustedes. También porque me sentí identificada. 

Gracias Marce por tus palabras, sos y serás una excelente mamá. 


Yo era de esas que decía que iba a alimentar a mi bebé solo con leche materna, que las chupetas jamás, que eso deformaba los dientes.
¿Yo? ¿Pelarme una teta en público? ¡NUNCA! Para eso uno se saca la lechita en la casa y la lleva en un chupón.
Yo decía que mi bebé jamás vería tele ni celular hasta cumplir 2 años porque eso es malo.
Obvioooo que voy a volver al trabajo después, mucho me costó estudiar como para dejar mi trabajo para quedarme con mi bebé.
Después de la maternidad seguiré teniendo vida social, que alguien me cuide al bebé y saldré con mis amigas peinada y maquillada divinamente.
 Mi bebé será super independiente, se dormirá solo y si llora hay que enseñarle que no se hace todo lo que quiere. Jamás hay que atenderle en cuanto llora, porque si no se acostumbran.
Mi bebé dormirá en su cuna, solito en su cuarto perfectamente decorado, porque eso de que duerman con uno en el cuarto, ¡no!
¡Que cansado esas mamás que andan con bebés llorones! Seguro son unos chineados porque la mamá los consciente mucho.
¡Ayyy sí, yo era de esas!


Y pensar ahora que mi bebé no tolera la leche materna y tengo que recurrir a fórmulas. Que he probado miles de chupetas esperando que agarre alguna y brinco en un pie cuando chupa una por un ratito.
Me ha tocado enseñarle las boobies a medio país, porque no me da tiempo en la casa de sacarme la leche y llevarla en un chupón o porque a veces solo la tetita de mami la calma.

Y pensar que a veces un video del celular es una gran salvada, porque la calma y la pone de buen humor.
Ahora lloro solo de pensar sobre el día que volveré al trabajo y no estaré las 24 horas junto a ella. ¿Vida social? ¡No gracias! A mí no me hace falta salir, en la noche solo me quiero acurrucar a la par de ella y dormir juntitas hechas una pelota. Y eso de peinarse y maquillarse está sobre valorado.

Me parte el corazón ver a mi bebé llorar y soy la primera que corre a su lado ante el primer sonido que haga. Y dormirá junto a nuestra cama hasta que ya no quepa en su cunita. Y ese cuarto perfectamente decorado ahora está lleno de chunches por todo lado, porque no da tiempo de decorar mucha cosa.

Y pobres las mamás que están con un bebé llorando, ¡se merecen un abrazo! No sabemos si a ese bebito le duele algo y su pobre mamá no sabe cómo ayudarlo y poderlo consolar.

Yo era de esas... que hablaba sin saber. No sabemos qué tipo de bebé tendremos o qué tipo de mamá seremos hasta que tenemos a nuestro bebé y somos realmente mamás. Pero tenemos al bebé perfecto para nosotras y somos las mamás perfectas para ellos.

No critiquemos si no estamos de acuerdo, ¡ni siquiera opinemos!
Para una mamá desesperada cualquier opinión no pedida es una crítica.
Una mamá merece una ovación de pie y un monumento, porque no hay sacrificio más bello y perfecto, ¡que ser una mamá!




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