La carta a Santa

Entre el corre corre de estas épocas, la decoración, el arbolito, los regalos y todo eso, no se me había ocurrido que ya era hora de iniciar el tema de SANTA.

Ya Sara cumplió 3 años y todo lo entiende y todo lo pregunta. Abordar el tema de Santa y el trineo y los regalos puede tender a ser complejo. De hecho escuché hace unos días a un señor en tele diciendo que él no iba a engañar a sus hijos con el asunto de Santa.

¿Engañar? Aunque no carece de veracidad es una palabra dura. Los que nos metimos en este enredo ya veremos qué hacer dentro de 5, 8 años al tener que enfrentar la realidad. Por ahora ¡disfrutemos!

Los que ya me han leído saben que yo todo lo pregunto y todo lo investigo. Antes de que google me tirara 3894168 respuestas, le pregunté a una de mis amigas a quien recordé ver a su hija en una foto con la carta a Santa.

¿Cuál es la logística? Obviamente la que uno prefiera. Mi amiga me dio una idea basada en la costumbre tradicional, así como me gustan las cosas a mi. Y no esperé ni 24 horas para llevarla a cabo.

ETAPA 1. La historia

Ni para qué repetirla. ¡Santa nos trae los regalos! Y debemos escribirle una carta para que él sepa qué es lo que queremos que nos regale. Simple. Con 3 años es inutil hablar de geografía del Polo Norte.

ETAPA 2. Las galletas

Para ello consulte a una amiga que es como mi libro de cocina personal por una receta fácil.

Cremar 2 barras de mantequilla con una taza de azúcar, se le agrega un huevo , una cucharadita de vainilla, dos cucharadas de jugo de naranja y se le va poniendo poco a poco dos tazas y media de harina con una cucharadita de Royal. Refrigero por dos horas y la estiro con harina y rodillo y corto las galletas.

¡Más fácil jamás!

ETAPA 3. La carta

De acá a que Sara aprenda a leer nos tocará hacer cartas-dibujo. 

Ella quiere un unicornio y eso dibujo :)

Recuerdo que mami siempre me enseñó a poner en la carta un agradecimiento por las cosas buenas del año y además a pedir amor, salud y Sa le agregó "disculpas". Eso va con mi puño y letra.}

ETAPA 4. Colocar todo. 

La carta en el árbol, las galletas a un lado en un plato decorado con canela. 

A dormir y a esperar. 

Y acá es donde mami hace la magia.

ETAPA 5. La carta se ha ido. 

Todavia se me llenan los ojos de agua cuando recuerdo la carita al ver que Santa se llevó la carta, se comió las galletas y dejó boronas en el plato. 

Además dejó un camino de escarcha por donde pasó... ¿no es esto demasiado chiva?

 

Yo por mi parte disfruté esto desde lo más profundo de mi ser. 

Gracias a Adry por la ideota, a Jesse por la receta y a Masi por ser mi cómplice paso por paso.

Y gracias a aquel señor que en su taller hizo juguetes para niños y los repartió llevando miles de sonrisas a todos y que cientos de años sigue llevando sonrisas. Bien merecido tiene de ser un santo, San Nicolás.